jueves, 4 de abril de 2019

Ciencia ficción ,realidad y psicoanálisis

La ciencia-ficción está lejos de ser un mero desborde de imaginación, un simple juego libre en un plano fantástico o un delirio controlado. Es una significativa expresión de los conflictos del hombre de hoy y una advertencia de lo que vendrá, pues, como ya ha señalado Jacques Sternberg, la ciencia-ficción "estalla en un terreno que es el de nuestro mundo moderno, embarazado de máquinas y cohetes, de fábricas y de invenciones sidéreas, de angustia ante el porvenir y de deseos de apasionadas conquistas".

Es lo que este género literario deja ver al ojo penetrante. Y a tal descubrimiento nos llevan los autores de esta obra: un escritor cuyos cuentos de ciencia-ficción han tenido excelente acogida y una psicoanalista de renombre internacional.

A través de una lúcida y rica exposición los autores enseñan a ver cómo la ciencia-ficción debe ser comprendida como una alarma de los peligros de la destrucción; como una advertencia de las amenazas de la alienación y un alerta de la acción penetrante de la publicidad moderna. El psicoanálisis permite descubrir el sentido que esconden las fantasías de futuro en cuanto al hombre por venir, la familia, el destino de los instintos de vida y de muerte, el control de la natalidad, la familia moderna y los sexos, la guerra y la supervivencia, la comunicación. Expuesto en lenguaje llano y ameno este libro va destinado a todo lector interesado en lograr una clara idea del mundo de hoy.

miércoles, 3 de abril de 2019

El libro de los 5 anillos

El libro de los cinco anillos  es un tratado sobre el kenjutsu escrito por Miyamoto Musashien su vejez —durante su retiro de ermitaño en la cueva de Reigandō en 1643— y finalizado el 19 de mayo de 1645, pocas semanas antes de su muerte. El libro está dedicado a su pupilo Terao Magonojo.
Se considera un tratado clásico sobre la estrategia militar de Japón, en una línea semejante a El arte de la guerra, escrito por el estratega chino Sun Tzu.
A diferencia de otros samuráis o ronin, Musashi desechó en su día la idea de fundar una escuela de kenjutsu (la cual más tarde perfeccionaría y llamaría como Niten Ichi Ryu) aprovechando su fama y prestigio en todo el Japón de la época, y prefirió una vida más espartana de dedicación exclusiva al estudio del arte de la espada mediante constantes viajes y vagabundeos por todo el país .